La curandera del alma

Llorar era uno de las herramientas innatas que tenemos en nuestro cuerpo para sanar. Lo hacemos sin ser conscientes de todo lo que libera, te hace soltar y distender. Es una de esas tantas cosas que nuestro cuerpo sabe hacer, sin más, sin “intervención”. Sencillamente sale, las lágrimas brotan… y aunque el dolor a vecesSigueSigue leyendo «La curandera del alma»