Para mí la espiritualidad femenina va ligada al empoderamiento.
A sentir el poder interior, a dejarlo expandirse, crecer…s
Saboreando cada instante de lo que somos.
Pero ocurre que vivimos sin tomar en cuenta esto, sin sentirlo realmente en cada célula… Y de forma espiritual enfermamos a través del cuerpo a menudo. Nos bloqueamos, nos perdemos…
Nos vivimos afuera, sin atender lo que dentro emerge, lo que necesita nutrirse, lo que nos ayuda a estar en Paz con Todo.