Seamos claras, hermana, tú no necesitas que otr@s te salven, te den herramientas, te guíen o sean tus maestr@s. No necesitas conseguir ningún titulo de nada, ni esperar que de fuera venga la clave o “la suerte” para salvarte.
Tú necesitas confiar en ti.
Confiar en que en tu interior tiene todas esas respuestas que tanto ansías encontrar.
Tú eres el maravilloso tesoro que estás esperando…
Como tuyo es el mapa, la brújula y los pasos.
Necesitas volver a conectar con tu cuerpo, con tus energías cíclicas, con tus lunas…
Necesitas reaprender a vivirte más tú, más libre, más salvaje… Conectar con la medicina de la Naturaleza y vivir.

Estoy algo cansada y algo triste por ver tanta palabrería, tantas “fórmulas” para enseñarnos a ser nosotras: más cíclicas, más productivas, más mujeres, más, más, más… ¿Más qué? ¡Si sólo queremos gozarnos! ¡Si sólo queremos re-descubrirnos, re-colocarnos, disfrutar de lo que YA somos!
Estoy reflexionando muchísimo en estos días en los que muchas mujeres me escriben contándome gran parte de su historia. Buscan consuelo, herramientas, respuestas… Buscan una caricia, alguien que escuche y les abrace fuerte. Todas desde una historia distintas, buscan básicamente una cosa ¡vivirse!
Y mi labor… ¡ay hermana mi labor, me siento taaaan afortunada, feliz y enamorada de mi labor! Que precisamente es ahí, cuando leo esos emails, comentarios, mensajes, o escucho llamadas, hago videoconferencias o en las sesiones individuales… es ahí cuando vuelvo sobre mis pasos, cuando reflexiono cómo es mi labor, qué es lo que quiero mostraros, qué quiero aportar y qué quiero dar. Quién soy, qué soy, cómo llego a vosotras…
Las que me conocéis, luneras de mi alma, (amigas, hermanas, hermagas, compañeras, maestras, Mujeres Tierra, mujeres de las sesiones, de los talleres y círculos….…) y las que más o menos seguís mi trabajo y las cositas que cuelgo, sabéis que siempre digo lo mismo y es que: yo no soy gurú de nada, ni maestra salvavidas, ni ninguna iluminada. No voy de listilla, de sabelotodo, ni de perfecta…
Que soy aprendiz y me encanta identificarme así: aprendiz eterna, y que mi labor precisamente es ser semilla y sembrar. Que voy caminando y aprendiendo, que yo también me caigo y me levanto o me quedo en el suelo dudando….
Soy semilla creciente, siempre aprendiendo…
Y si acompaño es porque eso es lo que realmente me nace, me viene de dentro, me hace conectar, me expande y me hace inmensamente feliz. Y es desde todo mi Ser desde donde lo hago: mi mente, mi corazón, mi útera caliente, mi alma y por sobretodo mi cuerpo… Todo lo que os muestro (tanto en información, como en talleres, como en ejercicios, en sesiones, en la Comunidad Online, en los partos…), primeramente ya yo lo he vivido. Ya lo he pasado por el cuerpo. Ya lo he hecho mío…
¡Porque de nada sirve contaros desde la teoría, sino yo lo he puesto en práctica!
Es desde esa honestidad que da el vivirlo desde el cuerpo, habitando este cuerpo poderoso y vulnerable que soy, desde donde me siento más humilde para acompañaros y sentiros… Y no podría ser de otra manera durante estos casi tres años…
Por eso, porque el habitarnos desde este cuerpo sigue siendo la clave que nos hace falta entender para darnos cuenta que somos NOSOTRAS las únicas que podemos darnos, salvarnos, guiarnos, ser maestras… ¡Nosotras solas! Bueno, solas solas no… con la tribu! Que siempre es más rico, más nutritivo y amoroso hacerlo con hermanas, con compañeras de camino… Pero siendo nosotras las únicas que tenemos el poder de cambiar, transformar, reconocer, observar, sanar…
¡No esperes de fuera! Eres tú, tú eres la clave.
Está en ti
¡No hay afuera sin antes haber adentro!
¡Tú eres, tú tienes, tú sabes!
Partiendo de todo esto,
hoy quiero compartir contigo una herramienta muy valiosa, para recordarte que tú eres la única que va a saber leer tu propio mapa y reconocer en tu ciclo menstrual, una auténtica herramienta de puro autoconocimiento. Para esto quiero presentarte una herramienta muy útil en nuestro ciclo:
Éste podría ser tu mejor amigo a partir de ahora. Si no lo conoces todavía, déjame presentártelo:
El diagrama menstrual es un calendario personal en forma de círculo para ir aprendiendo, observando, anotando comprendiendo sobre tu naturaleza cíclica y tu ciclo menstrual.
En él, vas a ir anotando tu sentir emocional, físico, psíquico o espiritual y todo aquello que veas significativo de tu día a día para ver pautas emocionales, físicos, etc, que se repitan de ciclo a ciclo.
Esto nos ayuda a comprender que somos cíclicas y no lineales como nos hacen creer, y que nuestro ciclo menstrual se asemeja al ciclo lunar y a sus distintas fases.
Así, nuestras energías menguan o crecen como la luna, nuestra creatividad, apetitito sexual, emociones, nuestra alimentación, nuestro cuerpo…
¡Eso es lo que vas a apuntar en cada día!
Puedes, por ejemplo anotar:
- O todo aquello que vaya surgiendo en ti. ¡Hazlo tuyo! Solo tú vas a leerlo, comprenderlo y sacar de él jugo 🙂
Instrucciones:
Tu mes va a comenzar siempre en tu primer día de sangrado.
Corresponde al día 1 del diagrama (es decir, si tu sangre baja hoy 13 de Octubre, lo anotarás ese día como día 1). Justo debajo de la fecha del calendario tienes un circulito donde, a partir de tu primer día de menstruación, puedes poner el día que corresponda de tu ciclo.
Continúa entonces completando el ciclo hasta que venga tu próxima menstruación.
Si tu ciclo es de más de 29 días, puedes continuar en otro diagrama lunar, y seguir registrando días hasta tu sangrado, en donde volverás a poner el día 1. (Esto te hará ver cuántos días de retraso o días en total tiene tu ciclo)
En el círculo interior, puedes escoger un color que te atraiga, que represente tu estado de ánimo ese día. En el círculo exterior, escribe palabras claves que describan tu nivel de energía, emociones, salud, apetito, sexualidad, creatividad, sueños etc.: lo que sea más relevante para ti. Tienes un cuadrito leyenda con símbolos que te pueden ayudar a representar tus arquetipos, deseo sexual, etc. Puedes creer otros que te sean más fáciles para recordar o te definan más. ¡El diagrama es algo muy personal!
Algunas cositas más….
- Para tener un registro y poder sacar “la chicha” a toda esta información, mínimo hay que hacerlo unos cuatro meses. A partir de ahí, ya podemos tener varios meses donde comparar, reconocer, estudiar, cómo somos durante por ejemplo la ovulación o qué nos remueve cuando estamos premenstruales. ¡Lo que quieras!
- Te recomiendo hacerlo todas las noches, cuando la información aún está fresca. Nos ayuda, además, esa constancia, a darnos un ratito para nosotras y tomar nota de cómo nos hemos sentido. Además, puedes llevar un diario menstrual paralelo, en donde desarrolles en más líneas (puede ser una libreta), cómo te ha ido el día, cómo te has sentido o qué has hecho. A modo de diario.
Puedes clicar con el botón derecho en la imagen de aquí abajo y darle a la opción “guardar como” para después imprimirlo y usarlo. O también puedes hacerlo tu misma. Para ello usa siempre el formato circular, y utiliza según te apetezca lápices, colores, imágenes… Lo que tú quieras :).
Deseo que lo disfrutes,
lo vivas, lo goces y aprendas con él… ¡De ti!
Puedes ver más a cerca de los arquetipos menstruales clicando en : https://latribulunera.com/category/arquetipos/
https://latribulunera.com/2016/04/06/no-solo-eres-una-eres-mil/
O en nuestro facebook: La Tribu Lunera
O en el libro de Miranda Gray “Luna Roja”.
Investiga. Cuestiona. Llévalo a tu historia…
Si tienes dudas,
Si quieres más sobre las sesiones personalizadas de acompañamiento cíclico, en base a la terapia menstrual:
escríbeme a tribulunera@gmail.com
Con todo mi amor
Rosa Bellido
Hola! tengo una duda: en el circulito debajo de la fecha del calendario se anota la fecha en que bajo la menstruacion? por ej 13/10 o entendi mal? No me quedo claro esa parte
Hola Yara, si, efectivamente. En los circulitos pequeños debajo de la fecha del calendario, anotas tus fechas. Por ejemplo, si hoy tienes tu primer día de sangrado, en el día 20 de Octubre apuntarás día 1. Recuerda que tu día de sangrado es el primer de tu ciclo, a partir de ahí completas el mes del calendario según vayas viviendo tu ciclo.
🙂